jueves, 18 de diciembre de 2008

Reseteo


No pido peras al olmo...
Soy consciente de los límites de la realidad, la imaginación y el empirismo. Además, creo que mis peticiones no se andan con fantasías. Quizás hace uno o dos meses podría dudar de esta afirmación pero hoy, dieciocho de Diciembre, merezco sentir la gratificación de haber apartado toda utopía de mi materia gris y del alejado órgano visceral que por el momento no se cansa de bombardear sangre.
Merezco dejar de pensar. Merezco que mis neuronas, glia acompañante y conexiones se reseteen.¡A resetear he dicho!, efectivamente, no resucitar, eso es cosa de dioses. Confío en ellas y en las no pocas alegrías que me han dado hace tanto y tan poco a la vez. ¿Qué será lo que logre excitarlas de nuevo?. Probaré con unos taquitos de jamón ibérico. Doble satisfacción entonces.
Hasta hace poco todo parecía ambiguo, todo parecía estar en un segundo o tercer plano. A mis huesos y músculos también los incluyo aquí. Ya no. Te doy las gracias.
Qué tendrá el asfalto y las grandes y medianas avenidas. Creo que si me quedara coja o algo peor que estoy esperando... podría morir de inanición, asfixia y tara de levitación... Los pies en la tierra, ahora sí... y tira millas.


Mis disculpas a los ofendidos, mis gracias a los que caminan al otro lado.

2 comentarios:

chá dijo...

Entonces era cierto eso que dicen...

Para bien o para mal, no sé, enhorabuena.

Foch dijo...

Dicen que dicen que anuncian que existe, un peculiar vegetal... que hace que te rias de la Bruja Averia, como la cebolla hace llorar...

no creo q haya conseguido nada que merezca la enhorabuena, no??